"Alguien por favor explíqueme como es mi arquitectura,
porque no se donde guardar sin olvidar las cosas que ya no son"
gracias Magui, encontraste palabras exactas
viernes, 31 de enero de 2014
viernes, 24 de enero de 2014
Beautiful
Me viste enfrente tuyo,
con el mar a un costado,
cantándote con los brazos abiertos,
mirándote a los ojos.
No todo es una mentira.
jueves, 23 de enero de 2014
Sacado del quilombo de mi cabeza un Veintipico de Diciembre de hace mucho
Hoy puedo estar tan segura de mí
como de cualquier persona a la que le demuestro lo que soy. Y no hablo de esas que
uno conoce en un grupo de gente desesperada por hacer amistades nuevas, hablo
de esas que son una cada miles. Y puedo estar tan segura de lo que viví, de los
caminos que tomé, de los que tuve retorno y pude volver, y de los que no. No
pude volver del camino que me llevó a la estabilidad que tengo ahora. No quise
volver. No quise darme la media vuelta porque sabía que había algo más, alguien
más. En realidad empecé todo como si fuese una más de esas historias que no te
importa si se van desgastando con el pasar del tiempo. Y porque a decir verdad,
nadie busca algo diferente, ni siquiera yo, a esta edad sin paz es difícil
transitarla, tanto porque nada es suficientemente confiable, y se busca a la
persona que demuestre la menor superficialidad, y si para sentirse valorada es necesario
aparentar algo distinto de lo que se es, se sigue estando tan pobre de
sentimientos como antes. Y esta vez dejé de mostrarme así, sin darme cuenta,
dejé todas mis actuaciones, y todos mis pensamientos anteriores. Pensar que fuí
tan de frente, tan decidida, sin mirar a los costados, bien centrada a buscar
lo que quería... Uno como los demás que pasaron siempre. Que pasó? No fue ese
“veranito de San Juan”, ni el “Ya se me va a pasar” del que tan segura hablaba.
Fue todas las épocas del año, fue el fin de uno y el comienzo de otro. No voy a
decir que esto nunca me pasó, pero lo que sí digo es que esta vez lo vivo más
que nunca, y trato de sacar todo lo bueno que me da, porque si llegamos al
final de todo y quedan recuerdos malos, no sería nada más que un tiempo perdido
lleno de reproches, nervios y peleas, y eso no es lo que una persona necesita
para sentirse mejor. Las discusiones son las que se encargan de desarmar lazos,
para unirlos están las sonrisas. Con todo esto me pregunto porque todos le
buscan la vuelta a todo, la explicación a todos los “¿por qué?”. No voy a negar
que lo hice desde el primer momento,y que trataba de buscarle una
respuesta a lo que me pasaba, y esta es la primera vez que no lo hago más. Y
que yo no lo haga no quiere decir que no venga alguien a intentar retrucarme lo
que piense, recordándome quienes somos, lo que hacemos, lo que estamos
viviendo, lo que intentamos hacer, lo que nos rodea, con lo que jugamos, lo que hacemos y deshacemos. De más está decir que es la primera vez que,
también, hice oídos sordos a los demás, y sostengo que si después me toca vivir
la peor de las desilusiones las voy a dejar pasar yo misma, sin ayuda de nadie.
Como también, si me toca vivir la mejor de las historias nadie más que yo la va
a recordar con una sonrisa. Lo bueno es que hoy está acá. No sé qué fue, qué
es, ni qué va a ser. Hoy sé que si me abraza me va a hacer bien.
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